Relleno de ácido hialurónico

¿Para qué sirve el relleno facial de ácido hialurónico?

Nuestros gestos cotidianos provocan el movimiento de los músculos faciales y con ello el desarrollo de líneas o marcas de expresión alrededor de la boca, los ojos o las zonas más utilizadas. Las infiltraciones o rellenos de ácido hialurónico contribuyen a atenuar este tipo de cambios faciales. Es un tratamiento indicado para depresiones cutáneas, arrugas, surcos y cicatrices. Esta técnica también nos permitirá el aumento o remodelación de ciertas zonas faciales como (aumento de pómulos, aumento de labios…).

¿En qué consiste?

Los rellenos faciales o infiltraciones son un tratamiento que se realiza en un breve espacio de tiempo y que consisten en introducir diferentes sustancias en las zonas indicadas aplicando ó no anestesia local. Tras el tratamiento suelen emplearse cremas específicas y se realiza un control médico durante varias semanas. En caso de que estas sustancias, siempre aprobadas por la Agencia Española del Medicamento y el Ministerio de Sanidad, se destinen a rellenos, éstos pueden ser de origen sintético o reabsorbibles, constituidos por ingredientes que se reabsorben con el paso del tiempo.

Aplicaciones

Principalmente lo utilizaremos para eliminar o atenuar las arrugas: patas de gallo, ojeras, código de barras. Nos servirá también para disimular cicatrices o redondear zonas como pómulos, mejillas o mentón. Otra de las aplicaciones más demandadas es el aumento del volumen de los labios, aunque también podemos dar forma a la cavidad nasal o remodelar y tensar la cara completamente.

Materiales de relleno

Se trata de una técnica que consiste en la inyección local de distintos productos con efecto relleno. El fin es corregir una depresión, cicatriz, surco, arruga o simplemente, aumentar el volumen de la zona inyectada. El material (gel de ácido hialurónico) que utilizamos es totalmente reabsorbible y desaparece de nuestro organismo a los pocos meses.